En vista de la escasez de componentes, el consorcio automotriz francés Renault ha previsto una pérdida de producción “de casi 500.000 automóviles al año”, según fue anunciado el viernes por la empresa.
El margen de ganancias de Renault no estará en riesgo ya que los recortes se aplicarán sobre modelos previamente escogidos.
Se dejaron de producir unos 170.000 vehículos de julio a septiembre debido al cierre de plantas a nivel mundial, producto de las dificultades enfrentadas por las cadenas de suministro globales, apuntó la empresa.
Numerosas fábricas no han vuelto a abrir, por lo que gran número de autos quedaron a medio fabricar a causa de los problemas logísticos y la falta de algunos componentes, particularmente los semiconductores que mayormente se elaboran en Asia, cuyo inventario se ha minimizado desde inicios de este año.
“Noviembre se anticipa como un mes crítico, situación que se prolongará hasta el primer semestre del 2022, mejorando en algo hacia finales de año”, afirmó Clotilde Delbos, directora financiera del grupo.
En el tercer trimestre de este año, Renault comercializó 599.027 autos, un 22,3% menos en comparación con el mismo lapso de 2020, época cuando la industria comenzó a recuperarse luego de haber estado paralizada por varios meses debido a la pandemia.
De enero a septiembre de este año, Renault vendió cerca de dos millones de unidades, mientras que en todo 2020 fueron 2,9 millones de autos y, en 2019, 3,8 millones.
Calendario de lanzamientos
Renault ha proyectado obtener un margen operativo anual de cerca del 2,8% de lo que facture.
“La potencial demanda por los nuevos modelos se puede desaprovechar debido al déficit de microchips, mientras que se han desacelerado los encargos por los modelos más antiguos”, acotó Delbos.
No hay cambios en cuanto al calendario de lanzamiento de los autos nuevos, como el Megane eléctrico cuyo debut se anuncia para el primer semestre de 2022. “Es la presentación del nuevo Renault”, apuntó Delbos.
Su éxito aceleraría la electrificación del resto del catálogo de Renault. Hoy día, más del 20% de las ventas europeas de Renault provienen de vehículos híbridos y eléctricos, con miras a cumplir con las metas europeas de emisiones de C02.
En otro contexto, la empresa ha negociado con los sindicatos la eliminación de 1.600 puestos de ingeniería y 400 en áreas de apoyo, actividades donde ya se han reducido 2.500 empleos como parte del plan de ahorro que se inició en la primavera boreal del 2020.
En 2021 podrían dejar de fabricarse a nivel mundial unos 7,7 millones de autos, debido a la carencia de piezas a escala global, de acuerdo al gabinete AlixPartners, lo que reduciría los ingresos de los consorcios automovilísticos en unos 210.000 millones de dólares (180.000 millones de euros).
